Si pensamos en la literatura del mundo hispanohablante, es probable que el primer escritor que se viene a la mente es Miguel de Cervantes.  Y no es sorprendente. Sus personajes principales, Don Quijote y Sancho Panza, constituyen un fenómeno transcultural. Son reconocidos por toda la gente en casi cualquier parte del mundo. Pero, aparte de Cervantes, ¿en quién pensamos en cuanto a la literatura hispana?

Bogotá, Colombia 

Una de las respuestas más comunes es Gabriel García Márquez, el amado escritor colombiano. Sus logros en el campo de la literatura han demostrado ser dignos del Premio Nobel de la Literatura. En Colombia, Márquez es la única persona a quien se ha dado este gran honor, y entre los países de Latinoamérica, hay solamente siete ganadores en total.

Después de su fallecimiento a la edad de 87, el 17 de abril del año pasado, el presidente actual de Colombia, Juan Manuel Santos, ha proclamado que él fue “el mayor colombiano que jamás ha vivido”, y aunque es una declaración fuerte, no se puede negar que Márquez, conocido cariñosamente por la gente colombiana como “Gabo”, o “Gabito”, de verdad es alguien representativo. En las obras de García Márquez, el autor muestra gran parte de la historia, la cultura y la política de la vida colombiana.

También, es famoso por la introducción de un nuevo movimiento literario, “el realismo mágico”, que se usa en muchas de sus obras, y sobre todo, por Cien Años de Soledad, el libro con el que ganó el Premio Nobel de la Literatura en 1982.

Hasta su fallecimiento, Márquez continuó escribiendo, muy en el estilo de un famoso dicho de él: “No es cierto que la gente deje de perseguir sueños porque envejecen, envejecen porque dejan de perseguir sueños”.

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Siempre me ha interesado la cultura del mundo hispanohablante, desde que empecé a estudiar español. Además, pienso que la literatura es una parte de la cultura que puede conectar a todas las personas en alguna manera, a pesar de su país de origen, o ámbito de la vida. Entonces, cuando descubrí el gran impacto que Márquez todavía tiene en la gente colombiana, y también en tantos lectores mundialmente, fue obvio para mi que debí escribir sobre esta figura impresionante.